10 Errores al intentar vender una casa en Perú
Vender una casa en Perú no es tarea sencilla, hay muchas ofertas interesantes y compradores buscando buenas oportunidades. Si tu propiedad no es competitiva desde un comienzo lo único que lograrás será gastar tiempo y dinero en promocionar tu inmueble. Tu casa sí se venderá, pero tras muchos meses de sufrimiento y por un precio por debajo del mercado. La verdad ante todo.
El blog de Bolsa Inmobiliaria, el nuevo portal inmobiliario del Perú te cuenta los errores más comunes cuando quieres vender una casa.
1. Salir a un precio alto
El error más común de los propietarios es valorar su propiedad por encima del precio del mercado. Se debe partir de una valoración objetiva elaborada por un experto en el rubro y en base a datos reales y actualizados. Un precio elevado solo alejará a posibles interesados y ayudará a tu competencia a vender su casa más rápido.
2. Descuidar la presentación
Una propiedad descuidada invita fácilmente a las objeciones y a abusivos regateos en el precio: “Es que vamos a gastar miles de dólares en la remodelación”, argumentan…y muchas veces con justa razón. Si vas a vender tu casa o departamento debes limpiarlo, ordenarlo, despejarlo, reparar desperfectos y si está en tus posibilidades darle una manito de pintura (pero blanca o crema).
3. Mala promoción
Si un inmueble está a precio de mercado y es fácil de encontrar en internet, las posibilidades de venderla serán mucho mayores. Un cartel vistoso ayuda, pero hoy en día 8 de 10 compradores inician su búsqueda por internet, debes estar y mover tus anuncios en los medios necesario.
4. Decoración muy personal
Al despersonalizar los ambientes harás más sencillo que el futuro propietario se imagine viviendo en su nueva casa. Esconde los osos de peluche y las fotografías de tu matrimonio que lo que vas a vender es la propiedad, además, una decoración sobrecargada hará que los espacios parezcan más pequeños.
Foto de https://blog.houseplans.com/
5. No tener la documentación preparada
Aunque no lo crean, muchos propietarios empiezan la promoción de su inmueble sin conocer la situación legal de su vivienda. Invierten tiempo y esfuerzo en atraer compradores y mostrar la propiedad para que llegado el momento de recibir la oferta ocurran contratiempos que retrasen o impidan la venta, que se pudieron haber solucionado desde un comienzo.
6. No recibir asesoría inmobiliaria
Como ya hemos dicho antes en nuestro artículo 10 mandamientos para vender tu casa o departamento, a menos que cuentes con tiempo, contactos, experiencia en ventas inmobiliarias, negociación, entre otros; es muy probable que necesites los servicios un asesor inmobiliario La venta de un inmueble no es una operación menor por lo que es recomendable acudir a un profesional inmobiliario que te asesore durante todo el proceso. ¡Pero busca uno de los buenos!
7. Malas fotos
Sin una buena foto el comprador ni siquiera abrirá tu anuncio. Sube imágenes con una buena resolución, que no sean muy pesadas (hay programas para comprimirlas) y que muestren los espacios despejados. Tus fotos deben resaltar los puntos fuertes del inmueble. Si un ambiente está desordenado o lleno de cosas, o lo desocupas o no lo muestres.
8. No atender las llamadas
Si uno coloca su teléfono es para que lo llamen. No puedes molestarte si te preguntan por el precio o detalles, debes ser cordial con toda persona que llame, si atiendes de mala manera perderás la venta sin siquiera haber mostrado la casa. En caso no puedes contestar devuelve siempre las llamadas.
9. No filtrar a los compradores
No se trata de mostrar tu casa a todo curioso que pase cerca, toque la puerta y quiera verla. Si te solicita su información básica primero, dale detalles del inmueble y luego coordina una cita. Los plantones de compradores son gajes del oficio, pero debes guardar paciencia y buen humor.
10. No estar dispuesto a negociar
Es bastante común que el propietario rechace las primeras ofertas porque asume que “llegarán mejores” sin intentar negociar si quiera. En la mayoría de casos termina vendiendo su casa a un precio inferior a la de la primera oferta recibida.