La Historia de Luchito EL PILLO
El mercado inmobiliario se ha vuelto cada vez más competitivo, las maneras de hacer las cosas, la forma de vender o arrendar un inmueble, la formalización hacia la que apuntamos todos los actores del sector, la manera de promocionar los inmuebles y todo lo concerniente al desarrollo ideal de una labor como la nuestra no es para nada comparable a lo que se hacía hace 10 o 20 años atrás.
La evolución del sector es evidente, pero lamentablemente nos seguimos encontrándonos con algunos casos que insisten en saltarse todas las normas de ética, así como el verdadero comportamiento y normas que un profesional debe guardar, saltando la confianza que otros colegas depositan en aquellos agentes inmobiliarios con los que comparten la comisión de las propiedades que captan y de todo el esfuerzo que ello conlleva.
Hace algunas semanas se suscitó un hecho que llamó mucho mi atención, estoy incluido en varios grupos en redes sociales de agentes inmobiliarios y es en aquellos grupos se hizo una denuncia a un agente al que he decidido nombrar “Luchito el Pillo”.
Pues resulta que “Luchito el Pillo”, según lo que dijeron estos colegas, se contactó con ellos con la finalidad de recopilar información sobre las propiedades que ellos tenían en cartera diciendo que “tenía clientes para aquellos inmuebles”; llevados por la confianza que hay que tener entre colegas pues se le dio la información solicitada, se le dio absolutamente toda la información y, al cabo de algunos días más, “Luchito el Pillo” publicó aquellas propiedades como propias.
Lo que originó aquel comportamiento de “Luchito el Pillo” fue que los propietarios se quejaron con los agentes inmobiliarios que contrataron, pues ellos no habían autorizado a nadie más para que comercializaran sus propiedades y les rescindieron el contrato de corretaje. Sí, todo el esfuerzo que hay que poner para tener una captación, la confianza que los propietarios depositan en los agentes que eligen y todo lo que conlleva esta parte de nuestra labor pues se va directamente al tacho por comportamientos como el de este “colega”.
La historia no termina aquí, muy por el contrario, es sólo el comienzo.
Los agentes que se vieron afectados por la actitud de “Luchito el Pillo” señalaron que cuando encararon a aquel colega por el comportamiento que ya describimos esperaban recibir alguna excusa, aunque sea una tonta excusa, pero lo que recibieron fue una y otra vez respuestas como “deberías agradecerme por darle publicidad a tu propiedad” o “pero ¿qué tiene de malo?”, lo que realmente me parece una burla para los colegas involucrados.
Es este tipo de comportamientos lo que justamente hemos tratado de desterrar los que diariamente procuramos que el mercado inmobiliario y los agentes que desempeñamos la labor inmobiliaria con la dedicación y el empeño para que nuestro sector sea visto como completamente profesional, para que nuestro trabajo sea respetado por aquellos que aún nos ven como simples “mercaderes” o “colocadores de letreros” y que nuestros clientes sepan que somos una parte fundamental en las transacciones inmobiliarias, que nuestra labor mueve un sector sumamente importante de la economía del país y no que aún algunos malos colegas siguen apelando a la criollada, a la viveza o al tratar de sacar un provecho completamente egoísta a costa del trabajo de otros compañeros.
He podido toparme con todo tipo de agentes a lo largo de 14 años de labor inmobiliaria, pero aún no dejo de sorprenderme al encontrarme con personajes como “Luchito el Pillo” y ver cómo siguen trabajando sin ética y sin ganas de hacer crecer un sector como el que nos acoge, que puede tener episodios como el que hoy les narro, pero que en su mayoría es sumamente satisfactorio.
Y tú ¿ya te topaste con “Luchito el Pillo”?
Linkedin: https://www.linkedin.com/in/angel-strat-7986047b
Twitter: https://twitter.com/StratAngel